El pasado 31 diciembre, fue un poco particular, muy especial gracias a los manjares que preparó con mucho mimo J. Después de despedir el año con sus doce uvas y campanadas, y video llamada vía skipe a los que no pudimos visitar por cosas del pfc 🙁
Después, nos invitaron a compartir las primeras horas del año unos amigos, y entonces me contaron una historia acerca de la procedencia del término “un vino tiene cuerpo” y mi cabeza se quedó con esta conclusión:
No sé si la historia es verídica, prefiero pensar que tiene más de mitología del vino que de realidad y seguir disfrutando de los ricos caldos de estos lares 😉
Y vosotros ¿Sabéis de dónde procede el término?
Sed felices!!
*
Yo creo q nos vendieron un poco la moto 😛 pero tu ilustración mola mucho 🙂
Qué chulo! Y las ilustraciones de Verónica son increíbles. Me gustan sobre todo los pájaros.
Saludos!
Yo también lo creo, pero mola dejar volar la imaginación. 😉
Silvia son su especialidad y debilidad 😉
Jaja, me imagino lo que os contaron ¡y es cierto! Antiguamente en los pueblos los niños estaban prohibidos en las bodegas. Todos sabían la historia de uno que entró borracho, se cayó en la cuba cuando estaba fermentando… y sí, qué cuerpo tenía ese vino…
Aunque a veces era solo una pata de jamón.
Ana la historia que nos contaron era así pero con tintes macabros que es lo que le dieron a la velada ese toque especial, nos dijeron que arrojaban cuerpos para deshacerse de ellos y que posteriormente partes de animales como dices, no sé qué hay de cierto en todo ello, me da que tiene más de leyenda o de lo que tu cuentas que de lo truculento de usar el vino para hacer desaparece cadáveres.
Gracias por pasarte por aquí y aportar 🙂
¡Feliz día!