Hay días en los que no sabes porqué, o tal vez sí el día amanece gris, no te apetece moverte y pareces caminar por inercia, sin rumbo….
El desayuno me ha regalado lectura y tranquilidad, pero no era lo que esperaba, la conferencia a pesar de su carácter positivo ha estado marcada por el pesimismo y la desolación ante la injusticia, porque este mundo es tremendamente injusto y parece no importarnos, parece que no somos personas. Sin embargo quiero quedarme con un par de frases… «El equilibrio ha de estar en escuchar a tu cabeza y a tu corazón ambos tienen razón.» «Déjate guiar por tu intuición, la respuesta está dentro de ti sólo tienes que buscarla, y lo que sabes es el siguiente paso, eso será lo único que tengas cierto donde te llevará ese paso, el final del camino no lo puedes ver y si te obsesionas con ello probablemente no lo llegarás.»
Y para terminar, ya de vuelta a casa Saramago me ilumina con unas palabras «Pero los únicos que pueden cambiar el mundo son los pesimistas. A los optimistas ya les parece bien como está.»