Descubrí el método Bullet Journal en un momento en que estaba investigando sobre productivdad porque necesitaba sacar adelante mi pfc (proyecto final de carrera). Entre GTDs, prioridades, pomodoros, etc llamó mi atención un método el bullet journall, un método diferente, presentado como una app analógica.
Cautivada por el mejor diseño web que he visto nunca, me decidí a probar, con algo de recelo. El sistema me funcionó súper bien. Si no lo conoces te recomiendo que le des una oportunidad porque no conozco a nadie que lo haya probado y no haya adoptado algo del método.
El sistema en sí es perfecto, pero como todo hay casi tantos usos como usuarios. En mi caso no tengo uno por año, porque utilizo más de uno al año y me parece arbitraria la deisión de dividir el tiempo como si hubiera un abismo entre el 31 de diciembre y el 1 de enero. A mediados de febrero ha llegado el cambio de bitácora.
Hasta ahora he probado para este método dos formatos A5 y A6 y sin duda me quedo con mayor. El A6 se me queda pequeño. También con distintos tamaños los packs de 3 de moleskine, los de Ikea, hasta que en esta ocasión decidí hacerme uno a mi medida. Lo mejor de este método es que es efectivo en cualquier libreta.
Antes de terminar mi último bullet journal, vi este video de Fran me gustó su sistema mensual en rejilla y su horario semanal siempre a la vista, en mi esccritorio. Probé, y me fue bien, por lo he incorpordo la planificación mensual en rejilla.
Con estos datos hice una previsión de las hojas que necesitaría para el tamaño A5.
Para codificar la planificación utilizo rotuladores de alcohol, por lo que necesitaba calcular el número de hojas de papel «marker» de Canson (en él los rotuladores no traspasan y además ahorras tinta). Para el resto del cuaderno utilicé papel de 100gr. El grafito en este papel no se está comportando como esperaba, así que para el próximo es probable que lo cambie. También probé el Pilot borrable que usa Fran y me gustó, pero no me ha durado casi nada, así que he vuelto a mi amado grafito.
Corté las tapas y comencé a doblar todas las hojas. Con mucho cuidado de marcar las «marker»(que tienen haz y envés diferenciados), y montando los cuadernillos para que las caras «buenas» queden enfrentadas.
Forré las tapas con papel que tenía guardado de lomography.
En la encuadernación copta el cosido queda visible, así que el color del hilo es importante. Utilizo este tipo de encuadernación para mis cuadernos porque permite abrirlos por completo y utilizar la doble página con comodidad.
He añadido un par de puntos de lectura que me faciliten tener a mano las páginas de planificación.
Y añadí gomas, son fundamentales en un cuaderno que siempre va contigo y en el que voy metiendo recortes, y pequeños papeles. Para colocar la goma he seguido los pasos de Wasel Wasel. Gracias Gemma por descubrirme la remachadora/ojetera. (Por cierto ella está explicando su bullet journal paso a paso desde cero aquí)
Una vez tienes cuaderno a planificar. Diferenciar entre eventos y tareas es importante aquí el ilustrador Magoz lo explica muy claro.
La espina dorsal del bullet journal es el índice.
Empiezo planificando con un calendario mensual en rejilla. Donde me hago una composición de lugar de lo que ocurre en el mes, en cuanto a eventos.
También planifico el mes en columna, como sugiere Ryder Carroll. Pero aquí añado tareas que debo realizar ese día y un espacio para los objetivos de este mes.
Una lista de tareas que se repiten cada día de la semana, me ayuda a no olvidar ninguna de esas tareas que se repiten.
Y luego los días y sus to do’s, siguiendo el sistema.
También hay espacio para bocetos.
Y en la contra, tengo listado todo el código de símbolos que utilizo para el sistema.
¿Qué método usas para organizarte?
pd: planificar lleva tiempo y requiere descanso.